La Euphorbia stenoclada, más conocida como Samanta, es una planta emblemática de Madagascar. Especialmente popular en los jardines botánicos, destaca por su aspecto escultural y su excepcional resistencia. Originaria de las regiones áridas de la isla, esta euforbia se caracteriza por sus ramas espinosas de formas arquitectónicas y su follaje minimalista. El resultado es una estética única perfectamente adaptada a los ambientes secos.
Traducción realizada con la versión gratuita del traductor DeepL.com
La Euphorbia stenoclada o Samanta, que crece de forma natural en zonas costeras y semidesérticas, alcanza a menudo una altura de 2 a 5 metros. Forma un arbusto denso o un pequeño árbol. Sus tallos de color gris plateado y sus afiladas espinas desempeñan una función protectora en su hábitat natural. Disuaden a los herbívoros y limitan la pérdida de agua. Además, sus pequeñas flores amarillas o verdosas, discretas pero encantadoras, aparecen sobre todo en la estación seca. Añaden un sutil toque de color a su aspecto robusto.
En el jardín botánico de la finca Au Bois Vert, en Ivato, cerca de Antananarivo, la Euphorbia stenoclada atrae la atención de los visitantes curiosos por descubrir las riquezas endémicas de Madagascar. En efecto, esta planta encarna a la perfección el espíritu de sostenibilidad y adaptación a condiciones difíciles. Este aspecto resuena con los principios ecológicos promovidos por el hotel y el lodge.
Su presencia en el jardín botánico no se limita a su función estética. La Euphorbia stenoclada o Samanta también tiene un valor educativo, ya que sensibiliza a los visitantes sobre la biodiversidad única de Madagascar y la importancia de conservarla.
Utilización de la planta
Euphorbia stenoclada no se limita a ser una planta ornamental. Desde hace siglos, las poblaciones locales de Madagascar la utilizan por sus propiedades medicinales, su madera y su capacidad para estructurar el paisaje. Su látex, aunque tóxico, se emplea a veces en usos tradicionales, especialmente para tratar infecciones cutáneas o como repelente natural contra parásitos. Sin embargo, su manipulación requiere gran precaución debido a su naturaleza cáustica. En las zonas rurales, esta euforbia desempeña un papel esencial en la creación de setos vivos. Sus temibles espinas la convierten en una barrera natural eficaz para proteger cultivos y viviendas. Además, su madera, aunque ligera, se utiliza ocasionalmente como material de construcción o como combustible. En un contexto moderno, Euphorbia stenoclada se integra perfectamente en jardines secos o espacios paisajísticos de bajo mantenimiento. Es una opción ideal para profesionales del paisajismo o aficionados a las plantas exóticas. En el jardín botánico de la finca Au Bois Vert, ilustra el potencial de una vegetación sostenible y estética, adaptada a climas áridos. Al cultivarla en un entorno cuidadosamente diseñado cerca de Ivato, los responsables del lugar también fomentan el respeto por las especies endémicas y su integración armoniosa en espacios como hoteles, restaurantes o lodges.
Información clave
Nombre común | Samanta, euforbia espinosa malgache |
Nombre científico | Euphorbia stenoclada |
Origen de la planta | Endémica de Madagascar |
Hábitat natural | Regiones áridas y costeras de Madagascar |
Ciclo biológico | Perenne |
Período de floración | Todo el año, con un pico durante la estación seca |